Últimas canciones

Tal vez fui yo
dejé el cuerpo atrás

quién sabe
quizás en vos había
una parte de la verdad

Lo cierto es que no puedo
seguirte nostalgiando
tengo que adiestrar esta soledad
y llenarla de flores
y dejarla a resguardo

Catedral renacentista

La confianza es nuestra
catedral renacentista

la edificamos con tiempo
de ella concebimos un templo

su valor radica
en el simple hecho
de que la conservemos
intacta

Días

confinada a tu olvido
los días me pasan por al lado
quizás se te ocurra uno de estos
pasar con ellos

Descarríos

hubo una verdad
descarriada de otras
verdades que no te
permitieron ver

acá en este rincón
del mundo
podíamos

quizás fue una distracción
descarriada de otras
distracciones
la que mostró con crudeza
esta terraza abandonada
por donde te fuiste

Alianza

No quiero el desalojo roído e imperativo
que tu mirada emplaza
someramente
casi por encima de la cicatriz
en el centro de este sabor amargo
de no querer irme

quiero tu mayor concentración
tu atención más precisa
el esmero más honesto

Me voy / hacemos real
este fragmento de vidas
esta carpa circense sin chiste
la alianza de los desiertos

Despierta

Estar despierta
vaciarme de las alegorías que se reclaman suyas
esquivar los charcos de su melancolía

Inútil simulacro

Hoy este inútil simulacro de retirada
que no alcanza
para desmentirnos burlando su epígrafe
se conforma con creer en este lapso
pobre incierto catastrófico imperfecto

esa ilusión irrisoria
ante el ardor de sabernos verdad

De lloviznas y batallas

Llovizna Buenos Aires
y la decepción al descubierto
dos preguntas en el morral
un diccionario de sinónimos
un sin rumbo hecho a medida
confesiones caídas en desuso
y la gloria de una guitarra de batalla
que se empapa para que
después tengamos de qué hablar.

Septicemia

Vida otra vez sola
descalza de certezas
estéril lo nunca puesto en papel

Peligro de septicemia si no se recorta
del recuerdo sutil

voraz impulso de tenerte a su lado

Utopía

Y si fuera una utopía
preguntas
si no existiera tal lugar

Yo digo
que ya van a volver
tus ganas de amar

alguna vez.

De boca y labios

Ahora que leo lo que dejó
y aunque hubiese preferido
que me lo regalara
de boca y labios
creo que pudo más el no poder.

Evolución de las penas

Después de algunas copas
disfrazando
el fracaso en sopor
sorbiendo la frustración
de la desilusión más cruda
(que es la de la confianza)
diré aquello que
todos saben
pero nadie
se ha atrevido a
decir en voz alta

las penas flotan
y esto nos significa
que no importa
cuánto nos empeñemos en ahogarlas,
ya aprendieron a nadar.

De la nada

Pararse frente al bastidor
frente a la hoja vacía
es el abismo
Poder desparramarse
en colores y palabras
el milagro.

Y existe esa proporción áurea
ese momento justo
cuando adentro y afuera se funden

y vuelve a nacer
algo de la nada.

Solidaridad

Hoy
padezco por
todas las personas
que se preguntan
qué hay
mejor
que cualquier pasado

y no tienen tus brazos
para contestarse.

Las primeras hojas secas

De vez en cuando en otoño
me tomo tres cuartos
de melancolía
y paseo por Buenos Aires
sin rumbo fijo
ni desmedidas exigencias

por solidaridad
en la estación Pueyrredón
me espera un tango de fondo
y las personas parecen mirarme
como si entendieran
algo que ni siquiera yo
llego a comprender.

De vez en cuando en otoño
me tomo tres cuartos
de melancolía
y al detenerme ante la vida
a mi alrededor
me invade
una satisfacción sublime
que me confirma
que ya cayeron
las primeras hojas secas.

Nota al pie

…y es que si fueras espejismo
no dudaría en desertificarme

Sobre amaneceres

Amenecer
sólo se amanece
a tu lado.

Lo otro,
despertar impiadosamente

Odio su perfume

Odio su perfume.
Odio que su perfume se
se me pegue como una
sanguijuela.

Odio que la sanguijuela
de su perfume
se me incruste en el olfato
como un diamante.

Odio su perfume
por sanguijuela
y por diamante

pero me empecino

en necesitarlo.

En el bolsillo

En el bolsillo izquierdo
tengo dos piezas
de un
rompecabezas

no encajan entre sí
pero juro
que son parte de la
misma imagen

digamos que tengo
en el bolsillo izquierdo
un buen augurio.

Engaños

Quién dijo
que podía caber en sus hojas
quién dejó que creyera
que a través de lo efímero
se puede olvidar

Quién te permitió
ponerme por escrito

y quién nos convenció
de que trazando
palabras
cede el tiempo