De espera

Estoy
invadida
de evidencias
que me maldicen de
espera.

Cerrar los ojos

Sólo cerrar los ojos
inicia este ritual de reminiscencias
el seductor repaso por cada extensión
                         de tu tez luna llena
la reproducción de los rumores de altillo
la visibilidad en la noche cerrada
el intercambio térmico
los alientos consumiendo el oxígeno
          de cada centímetro respirado.

Regreso

La irrupción de tus culpas
en la cocina
me recordaron
que un beso tardío
con años de demora 
puede ser más que un camino
de ida

puede ser volver
de una historia 
con un final 
anticipado

para ya no
regresar.

Los acordes

El problema son
los acordes
organizados
de determinada manera.

La sutileza entre
el amor y la indiferencia
el llanto y la aridez
que existas o no.

De fondo

Lo más fácil es
la música de fondo
los ojos clandestinos
las manos a tientas
pero sabiéndolo todo

lo difícil

revelar
que nada es
tan inminente
como el beso
que todavía
no
se
me
escapa

Silencio

Todas las preguntas
y las cornisas

se llaman al silencio

cuando te
sienten
respirar
a mi
lado.

Nunca igual

El momento en que abriste la puerta
y confirmaste tu cobardía
frente al silencio
de lo que no pudiste preguntar
supo al gintonic que
se me escurría por los recuerdos.

Con jugada

Por qué ir
se conjuga siempre
en gerundio

cuando de vos
hablamos

Sudestada

Hace frío en las noches
nada cambia realmente con el paso
de los años

No ha habido un solo invierno
en que no fueras sudestada.


Corazón al norte

Estoy al borde
de la soledad
y no del todo

Respiro tu partida
inminente
segura pero no
todavía

Me alcanza
con que vuelvas.
Me sobra
este presentimiento
de silencio.